lunes, 10 de septiembre de 2012

Referencias de Libertad, Referencias de Firme Revolución en la Paz.




Que significa ser un creyente de Dios, un creyente en la justicia, en la paz, en el amor. Para estos hay distintas posiciones:

1.- Por tradición: Aquel que cree simplemente por su necesidad intrínseca de creer, no se cuestiona nada, simplemente cree, así como no se cuestiona nada, tampoco se cuestiona su alrededor, simplemente vive, pensando que la vida solo tiene el presente, Por consiguiente, solo preocupado de sí mismo y su satisfacción.

2.- Por Conveniencia: Aquí si existe un pequeño cuestionamiento, ya que esta persona sabe que existe algo, por lo tanto lo cree, pero lo hace, solo para tener una pequeña paz interior, pero a la hora de mayores exigencias, compromisos y responsabilidades, su fuerza se diluye y simplemente cumple algunos ritos y no tiene mayor profundidad, no comprende el alcance de lo que cree, piensa que su fe comienza en él y termina en él, un creyente a su manera.

3.- Por Convicción: Es aquel que se lo cuestiona todo, ninguna explicación ilógica o irracional le sirve, se realiza todas las preguntas referentes a lo que se le propone creer y sobre quien se lo propone, desde cuando, como y para qué, y busca respuestas de forma seria y meticulosa, no le creerá a cualquiera, todo nuevo conocimiento se racionaliza y se pone en tela de juicio. Solo a medida que encuentra razón y fundamentos se incorporan a su mente los diferentes aspectos de lo espiritual o de la proposición que sea.

Respecto de estos tres tipos de creyentes (seguro existirán otros más), pero con estos tres grandes grupos, reflexiono lo siguiente:

Los grandes personajes, todos los grandes personajes que conozco, pertenecen al grupo 3, la convicción es el transporte a lo grande, a lo magnifico del ser humano, a desarrollar alguna capacidad en su plenitud. Es importante eso si mencionar que estos caminos son peligrosos, caminados sin guía, sin visiones de alguien o algunos que hayan realizado esta ruta, es fácil perderse, muy fácil perderse, pero algo que indica el norte es el "respeto", respeto por el otro, pero no un simple respeto superficial, básico y sin profundidad, un respeto entendido en su totalidad, la preocupación por el otro además de mí mismo, es la guía en este camino de crecimiento.

Y respecto de todo esto vuelvo a lo que motivo mi reflexión, han existido iluminados, grandes pensadores, grandes revolucionarios, de ejemplo cito a dos:

- Pedro, junto con los Apóstoles, respondió: "Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres.", San Pedro, Hch 5, 29

- "Cuando una ley es injusta, lo correcto es desobedecer",  Mahatma Gandhi

Todo pensado en el otro, en el respeto profundo al que sufre, al que no es escuchado o el que esta engañado en una prisión que no ve y que no siente.

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