Vi una película, un drama. La vi como de tarea por un curso que estoy haciendo, y me hizo pensar en mi vida amorosa. La historia me hizo recordar dos cosas, que una parte crucial de las relaciones es la serendipia, nunca se sabe que puede pasar y que, en el proceso, se aprende demasiado.
Me estaba equivocando en mi posición, dándole mucha seriedad a las posibles relaciones, que no está mal. Pero también tengo que disfrutar del amor, sentir esa conexión con una mujer que de alguna manera te completa.
E independiente de que pudiera o no ser la persona indicada para mí, igual va a ser una oportunidad para crecer, aprender y disfrutar de ese complemento natural, de esa femineidad tan extraordinaria que tienen las mujeres que en este minuto me estoy perdiendo.
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