La Vaquita Lechera, es una expresión que utiliza un amigo, y el la aplica a que existen ciertos ambientes laborales que no representan tus valores al 100%, pero, que te aportan ciertas cosas que para ti pueden valer la pena.
En esa dinámica a veces tienes que relacionarte con personas, que no necesariamente comparten tus convicciones principales. Hasta el momento, he tenido la suerte de generar pequeños oasis o burbujas en donde las personas más cercanas a mí comparten, esas digamos, columnas vertebrales que permiten desarrollar relaciones profundas.
Pero ahora, ya mi círculo se está ampliando y seguirá así, por lo tanto, se me presentó la necesidad de crear un espacio nuevo en mi entorno personal, para personas con las que no necesariamente comparto algunas de las características que yo considero más importantes, pero si varias de ellas que son muy valiosas.
Y la necesidad de crear un nuevo espacio, es porque son personas que serán más que personas conocidas, pero con las que no necesariamente podré desarrollar una amistad profunda, por esas diferencias.
Y es necesario darle un nombre a ese espacio y a este tipo de relación para que las expectativas estén acorde a esa realidad especial, de esa forma puedo generar muchas relaciones manteniendo una armonía en cómo se desarrollan.
Pensando en esto recordé la forma en como algun@s amig@s de la comunidad LGBTQIA+ nombran a algunos heteros, les dicen heteroaliades, jajajaja, y es una figura similar, porque no necesariamente ell@s a compartir todas las cosas fundamentales de su comunidad, pero son las suficientes para mantenerlos insertos en algún grado.
Aliad@ es una buena palabra.
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