domingo, 7 de abril de 2019

EN LO CIERTO Y EQUIVOCADO, CIERRES DE EXPERIENCIAS



Ya es algo que tenía claro, mi percepción de las situaciones tiene el sesgo de mis propias experiencias. Algo normal, de eso se tratan las opiniones, un juicio, una visión de las cosas para un momento determinado.

Hoy tiene una connotación distinta para mí, hay una responsabilidad implícita de la que quizás antes no estaba tan consciente.

Siento que en estos días hice un cierre inesperado de un largo proceso de duelo. Duelo de una versión de mí mismo del pasado.
Fue algo extraordinario para mí, de alguna manera siento que me liberó, siento que quizás ya por fin ya se cerró mi proceso de sanación y creo que puedo decir que lo que soy hoy, es aquello que quiero ser, con mucho por mejorar pero, como todos, uno nunca deja de aprender y de crecer.

Hace un par de semanas estaba preparando mi primer video de YouTube de al menos 100 que tengo en carpeta para desarrollar, todos tienen un enfoque social, tienen la intención de ser un mensaje para aquellos que están como mi yo del pasado, buscando respuestas y claves para vivir sus vidas de la mejor manera posible de acuerdo a la historia de cada uno. Todos tenemos objetivos similares, la única diferencia es de que camino empezamos y para mí, la idea de ese inicio, es que sea la mejor versión posible que puedas alcanzar con el fin de que en la corta vida que tenemos, lo que consigamos al final sea algo nuestro e idealmente no ocurra, que al final, nos demos cuenta que eso que alcanzamos no es lo que esperábamos. Dicho como los prisioneros, que no "quedemos pateando piedras", sino que sea la culminación de una serie de decisiones que hayas tomado en forma libre, pensando en ti y no en lo que otros hayan definido para ti, de buena o mala, manera o intención. 

Ocurrió que esta última experiencia, este cierre, movió mi aguja, modificó la dirección de mi brújula, ningún cambio de 180 grados, nada de eso, solo un par de grados, y que afecta sólo en el tono de mi mensaje, no en el fondo, pero que para alguien que tenga la intención de comunicar, sobre todo en cosas de la vida, no es algo que se pueda tomar a la ligera, como le decía a un amigo, yo quiero ayudar, quiero construir, así que lo que diga tiene que ser bueno y positivo para quien lo escuche.

En fin, creo que la moraleja de este cierre de ciclo es que cada experiencia que transmita debe ser con una clara letra chica de que lo que comparto son experiencias muy personales que no necesariamente representan el correcto resultado de las cosas, ni tampoco son una guía del que hacer para uno u otro caso, simplemente son experiencias que pueden o no tener sentido para algunos, si lo tienen enhorabuena porque seguramente tendrán algo de utilidad, pero con la salvedad de que cada respuesta tendrá siempre los matices del mundo interior de cada uno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario