martes, 27 de septiembre de 2011

Dinero Maldito !


La peste, el dolor, la ambición, la corrupción, la pena, el vacío, la miseria, el hambre, lo oscuro, la desigualdad, el abuso de poder, la avaricia, la enemistad, los virus, las epidemias, hurtos, robos, guerras, asesinatos, la perdición, lo malo.
Transmisor, conductor, manipulador, corruptor, agente impulsor de lo negativo del mundo, Maldito Dinero.
Como una fuerza silenciosa pero poderosa que rodea y atrapa a quien no disfruta y ama sus momentos, su libertad. Miserable corruptor de espíritus, de almas, de voluntades, de amistades, de valores, de seres humanos.
No existe en mi imaginación una peste comparable a tu acción, solo en libros de ficción donde existe la representación concreta del mal puedo encontrar un sinónimo, un gemelo a esta maldad. Acción descrita en la ficción, Tolkien, ¿Se inspiro en el dinero?, quien sabe en qué pensaba, no conozco mejor descripción de ese trabajo degenerativo del espíritu.
Entiendo, no es tu culpa, no, no eres tú, lo sé, es el asqueroso dinero, es su acción escondida pero descomunal que atrapa la conciencia y la retuerce.
Necesito aire, necesito desahogarme, la pena, la tristeza, su sombra me deprime, me roza el corazón y siento asco, otra batalla perdida, superando la amistad, el valor, el cariño, el amor, nuevamente tú, corrompes lo bueno, a quienes quiero. Insignificante papel sin vida, sin emociones, sin alma, no vales nada.
Yo te utilizo, tú no a mí, así tiene que ser siempre, confío en mi destino, en mi futuro, en mi alma, para que así sea.
No vales la pena, patético gestionador de objetos, solo te dedico esto para escupirte.

martes, 20 de septiembre de 2011

Caminar

Camino por la calle, veo la gente en dirección a su destino, 
me pregunto qué cosas definen sus vidas, que piensan, 
cuál será su preocupación?, los veo a todos, 
pero algunos llaman mi atención, 
caminando erguidos con un objetivo fijo en sus caras, 
al parecer con su vida resuelta, 
preocupados solamente por eso que descubrieron que es lo que les falta, 
caminando directamente a satisfacer esa necesidad, 
paro, pienso y reflexiono un par de segundos y concluyo, 
son mundos paralelos, todo un mundo paralelo en cada uno, 
Un universo paralelo de sueños, ideales, temores y esperanzas, 
Como viven?, Que los motiva?, saben ellos algo que yo no he descubierto?, 
la verdad?, Que es lo que ellos saben que yo no?, 
Cual es mi problema, mi solución, mi búsqueda en mi propio universo?, 
Quien puede dar respuesta a esta gran interrogante?, 
en forma concreta, nadie, lo sé. Solo yo mismo tengo esa misión y el deseo de buscar en lo profundo de mi mundo, esa motivación.
Eso que debo encontrar para que toda mi vida y mi muerte tengan sentido, 
ya descubrir esto fue un gran paso. 
Salir a caminar, tomar aire, ver gente pasar..., quien lo diría...

jueves, 15 de septiembre de 2011

Amor Sufriente

¿Los hombres son de Marte y las mujeres de Venus?, quizás puedo encontrarle un sentido al sin sentido  de ese título, nunca lo he leído, quizás debería, puede que encuentre pistas para el idioma en común, señales de humo, gestos o eventualmente cualquier forma de comunicación que me permita entender.  ¿Amor Platónico?, ¿Acaso eso existe?, ¿quién querría pasar semanas, meses o años de su vida pensando o sufriendo por eso?, ¿Existe un amor sufriente eterno?, ¿será eso saludable?, jaja, no lo creo.
Ya perdí la cuenta de las veces que llegas a mí, con tu intención oculta, escondida en pretextos, imaginando realidades inexistentes, ¿Buscando confundirme?, como una pesadilla desagradable que viene a mí una y otra vez. Me pregunto, me cuestiono, ni siquiera puedo describirlo en palabras, ¿Me cuestiono?.
Me preguntas ¿cómo estás?, respondo, bien ¿y tú?, me respondes, amor, amor sufriente, yo te digo ¿quieres intentarlo? Y tú te callas, ¿Quieres un encuentro furtivo?, lo siento, no soy de esos. Quizás ahora lo entiendo un poco más, releyendo una y otra vez estas palabras, escribiendo y reinventando esta línea por décima vez, creo que no hay nada que entender, solo es. Si, al parecer esa es la conclusión, nada que entender, yo sigo mi vida y bueno, ella…, seguirá en lo suyo, la próxima vez será diferente, no sé, lo siento, lo percibo.  Al parecer no soy tan malo en los idiomas.