Ya perdí la cuenta de los trabajos en los que he estado, pero el factor común, es que todos me han aburrido.
He llegado a la conclusión de que no existe ningún puesto y ningún trabajo que me guste.
Y no es que no haya probado distintas empresas ni puestos, he trabajado en casi todo lo que he querido.
He trabajado en industrias de banco, turismo, retail, comercial, construcción, ong (Iglesia) y OSFL.
En áreas comerciales, de finanzas, operaciones, procesos, informática y emprendimientos.
He realizado muchos tipos funciones, trabajos no calificados, Operador de Call Center, Vendedor puerta a puerta, Cajero, Guardia de seguridad, Vendedor de pan ilegal (un día), supervisor informal, ayudante de matemática, supervisor, encargado, jefe de unidad, jefe de departamento, jefe de área, subgerente y por ultimo gerente de una pequeña empresa por un corto tiempo.
Y después de toda esa experiencia, creo que puedo decir con relativa certeza que no existe ningún trabajo, ni puesto, que me guste.
Todo me aburrió, no hubo ningún trabajo en el que me pudiera proyectar en el tiempo sin sentir que estuviera en el lugar equivocado para mí, o sin sentir que estuviera perdiendo el precioso y tan escaso tiempo que tenemos para vivir.
Por otro lado, tampoco me llama la atención ser profesor, filósofo, sicologo, ni trabajar en algo relacionado con salud.
Y es un problema...,
Porque a mis 40 me quedan varios años de trabajo aun, así que tengo que definir que hacer en los posibles 20 años que me quedan para trabajar.
Y de alguna manera vivo en una dicotomía, me interesa absolutamente todo, pero no me apasiona particularmente nada. Me interesa todo, pero no me interesa abocar mi vida hacia algo particular.
Eso si, tengo un sentir que me direcciona. Lo único que me gusta hacer y que probablemente podría hacer todo el día y todos los días, es pensar y crear conceptos de cosas, que pudieran o no ser utilizados o desarrollados, eso es lo único que me mantiene entretenido, divertido, atento y que siento que podría hacer todos los días que me quedan de vida.
Ahora la forma de conseguir algo como eso según mi perspectiva, es siendo millonario o necesitando muy poco, cualquiera de los dos extremos podría ser una opción.
Personalmente estoy más cerca de la segunda, necesitar muy poco, pero es una alternativa demasiado insegura para cuando ya no tenga la fuerza del cuerpo que me acompañe.
Ser millonario la verdad es que está fuera de mi foco, no porque no pudiera, porque la verdad es que siento que podría, sino porque es necesaria la pasión y en mi caso siento que no vale la pena el riesgo de crear una pasión ficticia.
Pero, quiero la libertad de hacer lo que yo quiera, en el momento que yo quiera.
Quiero la libertad de pararme un día completo a pensar en lo que yo quiera, a observar lo que me llame la atención ese día.
A mi sorpresa cada vez que pienso en este tipo de cosas, me doy cuenta que de alguna forma defino parte de las aspiraciones que tiene un artista y quizás en ese sentido eso es lo que tengo que ser, un artista.
Ahora, eso daría lo mismo para cualquiera, pero en realidad mi personalidad, no se si pueda definir artística, o quizás si y aun no me empodero de eso.
Puede ser, en realidad, no hay correcto o incorrecto para el arte la verdad, quizás sea que tenga que inventar mi propio estilo de arte.
Pero si se que estaría relacionado con un arte relativo al pensar, al arte de pensar, no de filosofo, no de poeta, no de escritor, solo del pensar, de hilvanar ideas y dejar la imaginación volar.
Nunca falla escribir para mí, realmente antes de escribir esto, sentía que estaba en un remolino, sin tener una idea concreta de que hacer.
El título antes de este último párrafo era: "Un nuevo cambio de trabajo, Un problema".
Es extraordinario escribir tus pensamientos, me gustaría alguna vez lograr llegar al nivel de un comunicador excelso en elocuencia, para llegar a la mínima fracción de lo asombroso, de lo mágico, de lo catártico que es escribir lo que piensas.
Las primeras letras de este pensamiento eran de incertidumbre, de inseguridad, las últimas son de libertad, de confianza, de revelación.
Un artista es lo que tengo que ser, eso es todo, "no big deal", de hecho ya estoy en ese camino, solo que no lo había asumido de esta forma concreta, tan clara como ahora.
Y bueno, mientras tanto, da lo mismo en que trabaje en realidad, tengo que seguir enfocado en desarrollar mi arte, mi arte particular del pensar.
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