miércoles, 1 de mayo de 2019

EL TIEMPO DE MIS AMIGOS



Gracias a mi increíble Dios, tengo la suerte extraordinaria de tener amigos atemporales, esto quiere decir amigos con los cuales el tiempo se detiene.
He hablado con varios de ellos acerca de esta sublime característica, de pronto te encuentras con un amigo que no ves hace un año, incluso más y extraordinariamente, de forma casi mágica, pareciera como si los hubieras visto el día anterior.
Creo que ese tipo de amistades son como un tesoro que no tiene precio.

Analizando un poco las razones del cómo pudiera ocurrir algo así, es que quizás cuando esas amistades se crearon se vivieron en común experiencias o descubrieron cosas que dejaron una huella profunda, y que además de alguna manera te mostraron quien es el otro. Por eso finalmente cuando los ves, conversas acerca de aquello nuevo que hay en la vida de cada uno, pero que no modifica nada, ya que eres la misma persona que el otro ya conoció.

Pienso en esto porque hace poco me presentaron una persona para hacer amistad y me fue imposible evaluar siquiera la posibilidad de abrirle las puertas de mi amistad.

Para mí está siempre muy patente el disgusto o la corrección que recibo de varios de mis amigos por mi desaparición social.
Y desde la primera palabra que dije me sentí traicionando a esos amigos, así que simplemente descarté la posibilidad.

El tiempo que no entrego a muchos de mis amigos lo siento como un sacrificio enorme, que tiene consecuencias que ya he tenido que pagar y que tendré que seguir pagando al menos por un tiempo.
El primer tiempo lo invertí para descubrir mi propósito en este mundo y el tiempo actual lo estoy invirtiendo en concretar ese propósito, es decir, ha sido un tiempo de grandes frutos pero que a su vez ha tenido un alto costo.

Uno de tantos sueños que tengo es tener una casa grande en donde pueda invitar a todos mis amigos y hermanos a compartir momentos sin ningún tipo de preocupaciones, es mi sueño que esté todo absolutamente cubierto en donde lo único que se necesite sea su presencia. 
Es mi sueño tener negocios en donde pueda invitar a participar a mis amigos y hermanos en donde lo único que se necesite sea su presencia.

Esa es mi reflexión de esto nuevo que ocurrió para mí, cerrar las puertas, ya tengo de los mejores amigos que pudiera desear y que muy pocos tienen la suerte de tener, no tengo tiempo que perder, ya que ya estoy sacrificando bastante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario