Ahora, la razón del porqué escribo este pensamiento es porque hay varias cosas que yo necesito ir trabajando para construir una relación agradable, sana y de cariño constante.
Siempre que pienso en una buena relación recuerdo uno de mis amigos, no diré su nombre para no exponerlo, pero en realidad si lo diré, jajajajaja, porque creo que le gustará leerlo, jajajaja, mi gran amigo Gabriel.
Mi gran amigo tiene una característica extraordinaria y es que tiene una tremenda inteligencia emocional y eso le permite navegar o fluir en su relación conservando su esencia, pero sin dejar de atender la esencia de su pareja.
La inteligencia emocional yo diría que es clave para una relación equilibrada, es lo que permite el balance entre ser escuchado y escuchar, entre ser entendido y entender, entre recibir afecto y entregarlo
Y de eso, yo tengo muy poco, y la verdad es que no quiero que mi queridisima mujer tenga que adaptarse a esas carencias, yo quiero que podamos disfrutar lo más cercano a una relación plena.
Lo bueno es que así como aprendí lo que era el amor, esto no es distinto, también se puede aprender.
Eso si, al igual que el amor, tengo que empezar por lo básico, pequeñas acciones concretas que permitan construir un todo y que con la práctica suficiente se conviertan en naturales.
Dicho eso, voy a hacer una lista de todas las actitudes que debería ir desarrollando desde hoy, para que esta inteligencia emocional crezca y permita construir una relación equilibrada.
Si alguien quiere aportar a la lista, bienvenido(a)
- Comunicar desde mis sentimientos, apertura para sentirse vulnerable.
- Caballerosidad, ocuparme de su bienestar y comodidad.
- Atención en los detalles de lo que le guste y le haga sentir bien.
- Delicadeza, entender y respetar nuestras diferencias físicas y sicológicas.
Eso es lo que se me ocurre hasta ahora, no sé si está bien que sea una lista tan corta o quizás eso sea la demostración de todo lo que me falta. Pero bueno, ya hay por donde empezar.
