domingo, 14 de febrero de 2016

Juicios y Prejuicios

Estoy aplicando juicios a otros respecto del trabajo sobre mi mismo, transmitiendo una sensación o juicio de superioridad. Generando una sensación de categorías de inferiores o superiores. Esto es sin duda un indicador de que existe un error en como estoy interpretando el mundo y del como me desenvuelvo en el. ¿Pero cual será la manera para avanzar, contribuir, crecer y ayudar, sin generar una sensación desagradable y sin perder la identidad?
Creo que se trata de incorporar algunos pensamientos medulares al día a día.
Primero, tratando de entender desde la médula qué las vidas son distintas y que cada cual tiene un rol que es necesario, por lo que nadie está muy mal o muy bien, simplemente esta, el como se catalogue dependerá siempre del prisma con que se mire.
Segundo, no existe la vida ni la forma perfecta, no hay un camino predefinido, tampoco una fórmula secreta de paso a paso, todo es necesario, por lo tanto, respecto de mi mismo, yo no estoy en la posición más correcta o en lo mejor.
Tercero, lo correcto y lo mejor son conceptos demasiado amplios, de los cuales nunca jamás abarcare un 100%, entonces ¿yo puedo decir que estoy en lo correcto o en lo mejor? No, simplemente estoy en un proceso sin categorías, solo soy.
Cuarto, como en estos asuntos no existen absolutos ni certezas, yo no puedo catalogar, calificar o dirimir, solo estoy.
Quinto, considerando lo anterior, ¿Cómo se puede aconsejar u opinar?, primero empezando por lo más difícil, que es hacerlo solo cuando estas emplazado a opinar o aconsejar, segundo, antes de abrir la boca es pensar y preguntarse cuales son las necesidades del otro, tercero, preguntar al otro cuales son sus deseos o expectativas, cuarto, hablar.